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MODELO DE EVALUACIÓN NEUROPSICOLÓGICA CON PERFIL NEUROCOGNITIVO
Puedes descargar este power point donde encontrarás un modelo de Evaluación Neuropsicológica con perfil neurocognitivo de acuerdo al paradigma elaborado por la Neuropsicológa Silvia Pérez Fonticiella.
Se trabajó con una batería de pruebas para investigar las diferentes áreas, y se utilizó el WISC III para valorar nivel intelectual y análisis de capacidades, de acuerdo al modelo SPérez Fonticiella – Kaufman.
Se está trabajando en un nuevo modelo para aplicar al WISC IV.
Esperamos les sea de utilidad.
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LA LITERATURA NOS AYUDA A ENTENDER MEJOR A LOS NIÑOS CON TDAH
LAS «NUEVAS» AVENTURAS DE
TOM SAWYER.
«¡Diablo de chico!; ¡Cuándo acabaré de aprender sus mañas!; ¡Cuántas jugarretas como ésta no me habrá hecho y aún le hago caso. Parece que adivina hasta dónde puede atormentarme, antes de que llegue a montar en cólera; y sabe, el muy pillo, que si logra desconcertarme o hacerme reír ya todo se ha acabado y no soy capaz de pegarle. Cada vez que le dejo sin castigo, me remuerde la conciencia y cada vez que le pego, se me parte el corazón. “
Este monólogo podría ser uno de los tantos de hoy día, que provoca la conducta disruptiva de algún niño o adolescente de esos: inquietos, traviesos, que se hamacan en las sillas, que no hacen caso, que hacen papelones en las reuniones familiares, que no paran de hablar y discutir, que van tirando todo a su paso, en escenas a veces tragi-cómicas, sacando a sus mayores de las casillas y que cuando escuchamos sus quejas, hacen que los compadezcamos.
Sin embargo, estas quejas son de la tía Poly, personaje de Las aventuras de Tom Sawyer novela escrita por el estadounidense Mark Twain en1876.
A Tom Sawyer, el niño terrible de esa novela que ha sido disfrutada por varias generaciones, bien podríamos diagnosticarlo como un niño con Síndrome de Déficit Atencional, con Hiperactividad.
Twain, nos revive en este relato de historia antigua, las mismas que se viven en la actualidad, porque niños asi, obviamente siempre han estado y están presentes, en muchos hogares de todo el mundo.
Viejos problemas en nuevos niños.
“La mañana del lunes encontró a Tom Sawyer afligido. Las mañanas de los lunes le hallaban siempre así, porque eran el comienzo de otra semana de lento sufrir en la escuela.”
Una de sus áreas conflictivas que tratan de evitar: asistir a la escuela, o quedarse en casa y asumir responsabilidades. Para ello, despliegan toda clase de estratagemas: el dolor de panza, el dolor de cabeza, que se olvidó de copiar la tarea y la maestra le va a rezongar, que para qué va a la escuela, el clásico: “ya va…”, y aparece, con suerte, a la media hora, que es un niño y quiere jugar, entre otras. Actitudes que “agotan” a los adultos y les hacen acumular sensaciones de impotencia, de frustración, de rabia…
Hay una serie de conductas que llevan el sello distintivo del TDAH y que se complican, cada vez más, en la medida que se asocian con síntomas de ansiedad en el niño. La ansiedad, puede verse en la forma desmedida que actúa, respecto a cosas banales, y que se expresan:
A nivel cognitivo, en forma de fobias, ideas obsesivas, oposicionismo, terquedad, (realizan travesuras peligrosas por un lado y por otro, tal vez no pueden dormir sin la luz encendida).
A nivel somático, se manifiesta en hipertermia, algias, migrañas, diarreas…; a nivel inmunológico, en alergias respiratorias, dérmicas, intolerancias alimentarias e incluso, según lo señalado por algunos autores, en desequilibrios neurohormonales.
Las “malas compañías”
“Huckleberry era cordialmente aborrecido y temido por todas las madres, porque era holgazán, desobediente, ordinario y malo…, y porque los hijos de todas ellas lo admiraban tanto, se deleitaban en su velada compañía y sentían no atreverse a ser como él. Tom se parecía a todos los muchachos decentes, en que envidiaba a Huckleberry su no disimulada condición de abandonado y en que había recibido órdenes terminantes de no jugar con él. Por eso jugaba con él, en cuanto tenía la mínima ocasión.”
Debido a sutiles anomalías anatomo-funcionales, especialmente en la corteza órbito-frontal que determina la presencia de inestabilidad en todas las dimensiones del temperamento, son muy vulnerables a dejarse llevar por otros chicos que los provocan o les proponen desafíos y les “inducen a meterse en líos”, donde la cara visible “siempre son ellos”, y donde después reaccionan ante la decepción con desbordes emocionales, que van desde arranques de cólera, insultos, pegar a otros, hasta oposicionismo, o ataques de llanto.
Pero también, niños con este trastorno tienen cierta habilidad para seducir y manipular a otros; esto lo podemos ejemplificar en la novela de Twain, cuando relata que la tía Poly mandó a Tom a pintar la cerca de madera de su casa, y cómo Tom se las ingenió para evitar la tarea, convenciendo a otros niños, que era un honor hacer ese trabajo; hasta logró que le pagaran por hacerlo:
«Para cuando llegó la tarde, de ser literalmente un niño fastidiado por la mañana, Tom había pasado a nadar en la abundancia: tenía doce canicas, un cristal azul para mirar a través de él, un trozo de tiza, un soldadito de plomo, seis cohetes sorpresa, un gato con un solo ojo, un collar de perro, el mango de un cuchillo…. Encima, lo había pasado estupendamente con mucha compañía y la valla tenía tres capas de pintura primorosamente puesta. Si no se hubiera quedado sin pintura, podría haber llevado a la bancarrota a cada niño del pueblo».
“Cuando sus compañeros se calmaron, Tom hizo un honrado intento de estudiar; pero el tumulto de su cerebro no se lo permitía. Ocupó después su sitio, en la clase de lectura, y fue aquello un desastre; después, en la clase de geografía, convirtió lagos en montañas, montañas en ríos y ríos en continentes, hasta rehacer el caos; después, en la clase de escritura, donde fue «rebajado» por sus infinitas faltas y colocado el último, debió entregar la medalla de peltre que había lucido con ostentación, durante algunos meses.”
“Está en las nubes”; “es un despistado, pierde cosas”; “se olvida de decirme que hay reunión en el colegio”; “hace zapping con todo ..”. Éstas son algunas de las quejas frecuentes en los padres que acuden a la consulta, buscando orientación y ayuda. Focalizar su atención y mantenerla es uno de los problemas más acuciantes de los chicos con TDAH.
“Cuanto más ahínco ponía Tom en fijar toda su atención en el libro, más se dispersaban sus ideas. Así es que al fin, con un suspiro y un bostezo, abandonó el empeño. Le parecía que la salida de mediodía no iba a llegar nunca.”
APROXIMACIÓN A LA DIMENSIÓN COGNITIVO EMOCIONAL DEL TDAH.
“ -, no era lo que se llama malo, sino enredador y travieso. Nada más que tarambana y atolondrado, sí, señor. No tenía más reflexión que la que pudiera tener un potro. Nunca lo hacía con mala idea y no había otro de mejor corazón… -y la Tia Poly empezó a llorar ruidosamente “
La autoestima es un factor nuclear de la autoimagen y se construye sobre la base de dos sentimientos: el sentimiento del propio valer, cualidades y talentos que los demás ven en él, y el del propio poder, construido sobre la percepción de ser capaz de generar cambios positivos en si mismo, y en los demás.
La autoestima del niño, se construye a través del “verse”, en las actitudes y comentarios de los otros: “es tan solidario…»; “es tan inteligente…»; ”es insoportable…»; “ya no sabemos qué hacer con él”, pero especialmente sobre la base de la comunicación no verbal, de los gestos que hacemos, de las actitudes hacia él y toda la variedad de dinámicas comunicacionales no verbales.
Los niños con TDAH, tienden a tener muy baja autoestima, porque provocan tantas situaciones conflictivas en la casa, en la escuela, en su entorno en general, que podemos entender, que no provoquen juicio positivo y alentador, ni de su entorno social ni familiar, o serán objeto de múltiples reproches y golpes: “¿por qué me haces esto a mi…?”; “te voy a matar , mira lo que hiciste, no servís para nada!”.
«Permaneció sentado largo rato meditando, con los codos en las rodillas y la barbilla en las manos. Le parecía que la vida era no más que una carga y casi envidiaba a Jimmy Hodges, que hacía poco se había librado de ella. Qué apacible debía de ser, pensó, yacer y dormir y soñar por siempre jamás, con el viento murmurando por entre los árboles y meciendo las flores y las hierbas de la tumba y no tener ya, nunca, molestias ni dolores que sufrir.»
El “locus de control externo” del TDAH.
Entre los 7 y los 10 años, la familia, la escuela y la comunidad, entregan a los niños un corpus de normas, valores y principios que gradualmente internalizarán como propios, asi como los límites que apuntan a protegerlos y/o favorecer su socialización adecuada . Pero, para que todo esto funcione, no alcanza con la parte de los adultos, sino que depende también de la madurez socio-emocional del niño. Un niño que no reflexiona, que es impulsivo y que no lo logra aprender de sus errores y sacar conclusiones, «( ayer lo puse en penitencia por lo que hizo y hoy vuelve a hacerlo, no le importa nada, ya no hay con que entrarle…”), es un chico que tardará enormemente en adquirir un corpus valórico firme y consistente. Permanece si, sujeto al “principio de la obediencia impuesta”, sólo se someterá a las normas y principios éticos, por temor a las sanciones, pero va a trasgredirlos cada vez que crea que no hay riesgo de ser sancionado.
Hay un abanico de conductas que sacan de quicio a los adultos, como el “no” permanente a cada cosa que le pedimos, el excesivo egocentrismo, las conductas desafiantes, transgresoras, e incluso a aquellas que pueden poner en riesgo su integridad física o la de otros.
En los niños con TDAH, decimos que su locus de control es externo, pues no han internalizado los valores y normas y de este modo, no puede regular socialmente su conducta. Y en general, la conducta altanera y desafiante, es una forma de enmascarar su autodesvalorización.
“…el terror que le llevaba cada noche a arrepentirse de sus travesuras y a disponerse a actuar con rectitud…., disposición que se diluía al amanecer, cuando las sombras dejaban de parecer amenazadoras.”
También hay un desarrollo insuficiente a nivel del cíngulo anterior, corteza temporal, dorsolateral y órbito-frontal del cerebro, que conduce a una pobre capacidad para utilizar la memoria de trabajo y la noción de temporalidad, necesaria para la construcción de la memoria biográfica que consolida nuestra identidad y nuestro autoconocimiento, permitiendo conceptualizar nuestras emociones, llevando a los chicos a experimentar sensaciones viscerales molestas, autorreproches, insatisfacción crónica, apatía, (todos les aburre, parecen indiferentes al esfuerzo y dedicación de sus padres y maestros), tienen fases de humor depresivo.
Las grietas de la relación del niño con su familia llevan a un mal pronóstico del niño con TDAH que no es tratado a tiempo. La mayoría de los papás de estos chicos, llegan a la clínica relatando episodios de trastornos en alguna esfera de la conducta, ya desde el primer año de vida: “no nos dejaba dormir”, “no paraba de llorar “, “nadie sabia que le pasaba, lo tenia que hacer santiguar por el mal de ojo o la pata de cabra”.
Luego, se suman las quejas de los educadores, en la etapa preescolar y escolar, todos reconocen que es inteligente, que dice y hace cosas que parecen de niños superiores a su edad, pero que no logra cumplir con los requerimientos académicos que se esperan de él, según el grado, que se “hace el payaso” en la clase, que contesta precipitadamente, que cumple con las tareas con el mínimo esfuerzo.
No faltando por supuesto, el vecino que nos llama para decirnos que le abrió la jaula a su pájaro, que le tiró una piedra y le rompió un vidrio, que no deja de molestar a su perro.
Todos estos procesos de quiebre de la relación del niño con su familia y el entorno familiar, llegan a un punto crítico a medida que el chico llega a la pubertad y la adolescencia. Esta etapa, provoca en los chicos un desequilibrio mayor de su autorregulación emocional, aumentando la ansiedad que los chicos canalizaran a través de la TV, los videojuegos, el hablar eternamente por teléfono o chatear, el mal talante, el desafío, el consumo de drogas o alcohol.
Desde el conocimiento científico del tema, y mi experiencia profesional, siempre recomiendo a los padres, atender al chico con estas características antes de llegar a esta etapa, que por cierto, tiene ya sus complicaciones normales y propias, que hacen mas difícil aún, revertir la problemática del niño y su entorno, para lograr una mejora en la calidad de vida.
“La tía estaba preocupada; empezó a probar toda clase de medicinas en el muchacho.”
Las preocupaciones de la tía Poly y su “matadolores”, nos brindan un panorama muy real del angustiante peregrinar de los padres entre maestros, escuelas, psicólogos, psicopedagogos, medicaciones, sintiéndose frustrados porque no ven buenos resultados a la brevedad, porque aspectos áridos y reiterativos de la personalidad de su hijos no cambian sustancialmente.
No hay soluciones mágicas, hay que tener calma, comprensión y sobre todo, mucho conocimiento sobre el tema, para poder ayudar a estas personitas y su grupo familiar. Hay que trabajar en equipo, profesionales de diferentes disciplinas, la familia y las instituciones sociales y educativas, interactuando y consolidando los vínculos necesarios para entender la problemática del sujeto, e ir logrando modificaciones de su “mundo interno”, que repercutan en el externo y nos permitan ir encontrando que ese niño, niña, adolescente o adulto con TDAH, puedan recomponer su caleidoscopio y mostrarnos también , las mejores facetas de si mismo.
No encuentro mejores palabras para dar cierre al artículo, que las del propio Mark Twain, palabras que hacen referencia al entramado social, a nuestros hijos, y a los que cada uno de ellos tiene de nosotros mismos y de nuestros ancestros:
«La mayoría de las aventuras que refiero en este libro son reflejo de la realidad; una o dos, me han ocurrido a mi mismo; el resto, son anécdotas de otros niños, compañeros míos de la escuela. Huck Finn ha existido; Tom Sawyer también, si bien no se trata de un solo individuo; es una combinación de las características de tres chiquillos amigos. Es pues un trabajo arquitectónico de orden compuesto.
Las raras supersticiones de las que doy fe, prevalecían entre los niños y los esclavos del Oeste, en la época de este relato.
A pesar de que destino este libro a pasatiempo de muchachos, espero que no lo desprecien los hombres ni las mujeres, ya que en parte, está compuesto con la idea de despertar recuerdos del pasado en los adultos y exponer cómo sentían, pensaban y hablaban, y en qué raras empresas se embarcaban.» MARK TWAIN
Prof. Neuropsic. Ing. Silvia Pérez Fonticiella
CONSULTORA EN NEUROCIENCIAS.
IINNUAR – Instituto de Neurociencias
SANATORIO ALLENDE
LAS DIFICULTADES DE APRENDIZAJE DE LAS MATEMATICAS.
DISCALCULIA: UN POCO MAS QUE COMETER ERRORES EN LOS CALCULOS.
“El ser humano, aun en sus estados primarios de desarrollo, posee una facultad la cual, por no encontrar un nombre mejor, llamaré sentido numérico. Esta facultad le permite reconocer que algo ha cambiado en una colección pequeña cuando, sin su conocimiento directo, un objeto ha sido eliminado o agregado a la colección”
Esta frase la escribe Tobias Dantzing en 1954, proclamando la existencia de facultades cognoscitivas innatas en el cerebro humano, postura, que entra en contradicción con la tesis de Piaget, según la cual el cerebro humano, construye todas sus estructuras cognoscitivas por medio de un proceso dialéctico de interacción con el mundo circundante.
Stanislas Dehaene, un matemático convertido en neuropsicólogo, a partir de un análisis amplio y detallado de experimentos recientes en el campo de la neurología, apoya el punto de vista de Dantzing, señalando que ciertas facultades numéricas se encuentran genéticamente impresas en nuestro cerebro. Estas facultades, asi como nuestra capacidad para distinguir colores, son el resultado de un proceso evolutivo de adaptación por selección natural.
Se ha podido constatar a través de diversos experimentos científicos, que el sentido numérico de un niño pasa por diferentes estadios.
De este modo, un recién nacido, puede distinguir, dos objetos de tres, y quizás tres de cuatro, no mas allá de 4, y sus oídos, pueden notar la diferencia entre dos y tres sonidos.
Un bebé alrededor de los 6 meses de edad, es capaz de reconocer números pequeños de objetos o sonidos y combinarlos en operaciones elementales de sumas y restas.
A los 15 meses, los bebes empiezan a seleccionar espontáneamente el mayor entre dos conjuntos de juguetes, mostrando los primeros rudimentos de comparación numérica.
INDICADORES DE RIESGO RESPECTO A LA ADQUISICION DE LOS CONOCIMIENTOS MATEMATICOS EN LOS NIÑOS DE EDAD PRESCOLAR.
A los 4 años, un niño debería poder resolver correctamente las siguientes tareas que les proponemos:
Reunimos 10 objetos, y le pedimos al niño que los cuente; alli observaremos si lo hace correctamente, si omite objetos, si agrega. Esto nos permite detectar si ha adquirido nociones de secuencia y de generación de una serie numérica.
Luego, armamos otra agrupación de objetos y le decimos que los empiece a contar, en determinado momento, le pedimos que nos diga, cuantos ha contado ya y cuantos le quedan por contar.
Observar si logra ordenar los objetos de acuerdo a sus cualidades fisicas, forma, color, tamaño lo que lo llevará a poder establecer equivalencias.
A los 4 años y medio, ya es capaz de hacer comparación de diversas magnitudes, de ponderar, de poder apreciar las diferencias de peso de los objetos.
A los 5 años objetiva el tiempo, debería poder referirse a periodos de tiempo usuales, ayer, mañana, hoy.
También a los 5 años, los niños pueden llegar a hacer con rapidez comparaciones precisas entre magnitudes de números seguidos como el 8 y el 9, porque están muy familiarizados con las relaciones de sucesión numérica (“cuando me pongo a contar, el 9 viene después del 8, asi que el 9 es mas grande.”)
Para esta edad, los niños ya aplican el principio de correspondencia, es decir, aplica un número a cada uno de los objetos que enumeran y solo uno a uno.
Los indicadores de riesgo de problemas mas graves, los encontraríamos si un niño a los 4 años, no logra:
Ø Si el niño no realiza ningún intento de etiquetar cada objeto de un conjunto con una palabra para contar.
Ø Si no realiza intentos de llevar la cuenta de los objetos contados y sin contar etiquetando los objetos del conjunto de una forma totalmente asistemática.
Ø Si no aplica la regla del valor cardinal, es decir, reconocer que el valor numérico del conjunto que se cuenta, se expresa por el valor cardinal final que lo representa.
Ø Si no es capaz de separar hasta cinco objetos cuando se lo solicita
Ø Si no puede comparar exitosamente, entre números seguidos o separados, entre el 1 y el 5.
Ø Si usa arbitrariamente, determinadas etiquetas numéricas, por ejemplo, cuenta y siempre hay 3, aunque se le presenten mas o menos de 3 objetos.
Existe una discusión actualmente sobre el uso del termino Discalculia respecto a generalizarlo para todo trastorno del área de las matemáticas.
Podemos definir las Matemáticas como una ciencia que tiene por fin la formación de conceptos abstractos, independientes del material empleado y la situación real de la que surgieron y permite al individuo razonar sobre formulaciones y proposiciones. De este modo, la matemática comprende la aritmética y la geometría, por lo tanto, no se debería usar dificultad en matemática y dificultad en aritmética como sinónimos y, menos todavía, denominar a ambas ‘discalculia’.
Por lo tanto, una clasificación de las dificultades puede ser:
* Dismatematia: Dificultad en el aprendizaje de la matemática.
* Disaritmetia:
Dificultad en la adquisición del concepto de número y
su procesamiento.
Dificultad en el aprendizaje del cálculo oral, escrito, o ambos- (discalculia):
Dificultad en la resolución de problemas.
* Disgeometría:
Dificultad en la adquisición de las nociones fundamentales,
su reconocimiento, inclusión de clases y clasificación.
Dificultad en el planteamiento y resolución de algoritmos
con el fin de lograr el trazado de figuras.
Dificultad en la resolución de problemas.
Las dificultades serían secundarias a:
Problemas pedagógicos o institucionales.
Problemas neuropsicológicos, alteración de las funciones cerebrales superiores.
Cognitivos:
1. Nivel intelectual.
2. Nivel de pensamiento.
3. Funciones psicológicas superiores.
a. Gnosias.
b. Praxias.
c. Lenguaje.
d. De la atención.
e. De la memoria: de funcionamiento a corto o largo plazo.
Afectivos.
Nivel socioeconómico y cultural insuficiente.
Agregamos que puede haber dificultades de causa múltiple y secundarias a una dificultad primaria o pueden agregarse una u otras secundarias o concomitantes. El hecho de que a la dificultad en la matemática se agregue una dislexia, por ejemplo, o una dificultad en las gnosias o las praxias, no quiere decir que una provoque a la otra, ya que pueden ser concomitantes, es decir, constituir una comorbilidad. Puede haber también dificultades de causa desconocida o múltiple.
Algunos neurólogos plantean que las dificultades en las matemáticas tienen un origen genético, y hay científicos en la actualidad trabajando para tratar de probar esta hipótesis.
En nuestra experiencia, hemos constatado, que las dificultades en las matemáticas nunca aparecen aisladas, por ejemplo las dificultades en la resolución de problemas, aparecen muy asociadas a dificultades en la comprensión lectora, y a dificultades atencionales, las dificultades en el cálculo aparecen habitualmente asociadas a alteraciones en el manejo del espacio que hace el chico, y funciones cerebrales que deberían haberse desarrollado correctamente en etapas mas tempranas de la niñez. Por lo tanto los tratamientos de estos chicos, siempre requieren que los profesionales a cargo, empiecen por trabajar en la potenciación de esas funciones previas que sirven de base para adquirir los conocimientos matemáticos.
De este modo, la corrección del trastorno no esta en poner al chico a hacer muchas cuentas y resolver muchos problemas, sino, primero , detectar que función cerebral que sirve de base para resolver problemas y hacer cuentas esta alterada, y trabajar sobre ella.
EL DESARRROLLO DE LAS COMPETENCIAS PREVIAS A LA COMPRENSION DEL NÚMERO.
Hay determinados procesos que son fundamentales y se deben desarrollar en forma previa y temprana, para que el niño pueda lograr el desarrollo de las competencias lógico-matemáticas. Estos procesos son los que serán potenciados y desarrollados en el tratamiento de estimulación neurocognitiva, que realizado a través de software especifico da muy buenos resultados. Estos son :
- La adquisición de conceptos
- La adquisición de símbolos y signos necesarios para operar.
- El desarrollo de ciertas habilidades cognitivas, (atención, memoria, comprensión verbal, razonamiento).
· RESOLUCION DE PROBLEMAS
· OPERACIONES ARITMETICAS BÁSICAS.
· CONCEPTO DE NUMERO
Procesos Cognitivos: Conceptos Básicos:
Atención Tamaño
Memoria Forma
Razonamiento Lenguaje Cantidad
Percepción Orden
Posición
ÁMBITO COGNITIVO PREVIO.
La base de todo aprendizaje es una forma de cambio químico o estructural en las células vivas. Pero todavía desconocemos si las señales recibidas por un organismo se codifican y almacenan como moléculas especiales y complejas o si los cambios se producen en las membranas y otras estructuras celulares.
Sin embargo, algunos científicos han logrado poder dar cuenta de que partes del cerebro están involucradas en las diferentes tareas que tienen que ver con el lenguaje y las nociones lógico-matemáticas.
Localización de las capacidades en las distintas áreas cerebrales
según Keller y Sutton 1991
REGIÓN
CAPACIDAD
Hemisferio derecho
Organización viso-espacial
Hemisferio dominante
del lenguaje
Habilidades lingüísticas
Áreas de asociación Hemisferio Dominante
Lectura y comprensión de problemas verbales, comprensión
de conceptos y procedimientos matemáticos.
Lóbulos frontales
Cálculos mentales rápidos, conceptualizados abstracta,
habilidades de solución de problemas, ejecución oral y escrita
Lóbulos parietales
Funciones motóricas, uso de sensaciones táctiles
Lóbulo parietal izquierdo
Habilidades de secuenciación.
Lóbulos occipitales
Discriminación visual de símbolos matemáticos escritos
Lóbulos temporales
Percepción auditiva, memoria verbal a largo plazo.
Lóbulo temporal dominante
Memoria de series, hechos matemáticos básicos, sublocalización durante la solución de problemas.
Cómo verán, en virtud de los nuevos conocimientos acerca del funcionamiento de nuestro cerebro que nos están brindando las Neurociencias, hace que para elaborar un diagnostico para conocer el origen de las dificultades del aprendizaje, asi como un correcto plan de tratamiento, los profesionales requieran una muy buena formación en variadas disciplinas, especialmente en Neurologia, ya que toda modificación de la conducta, implicará una modificación en el sustrato neuronal que la sustenta.
Esperamos contribuir con este articulo a que padres y educadores puedan profundizar sus conocimientos sobre estos complejos procesos e ir observando el desarrollo de los niños de modo de poder detectar a tiempo, las áreas mas comprometidas para lograr un buen desarrollo y adquisición de aprendizajes.
Silvia Pérez Fonticiella
CONSULTORA EN NEUROCIENCIAS
IINNUAR INVESTIGACÓN EN NEUROCIENCIAS
DiagnÓstico y tratamiento de las dificultades del aprendizaje y discapacidades.
C O N S U L T O R I O S:
CORDOBA
VILLA CARLOS PAZ
cordobaaprendizaje@gmail.com
NEUROCIENCIAS Y TECNOLOGIA QUE MEJORA LA CALIDAD DE VIDA (actualizado)
Hace ya unos 15 años atrás , preparando una conferencia sobre Neuroplasticidad en el Hospital de Clínicas de Montevideo con la Prof Neuropoediatra Rosario Bonaglia, y el Prof.Neurólogo Infantil Raúl Ruggia(1), el profesor nos cuenta que el neurocientífico Dr. J. Schwartz (2) en USA, había logrado registrar determinado tipo de actividad cerebral en personas con discapacidad.
La investigación y experiencia consistía en lo siguiente:
Se realizaba un escaneo de la corteza cerebral de deportistas, jugadores de fútbol, corredores olímpicos y se observaba qué áreas del cerebro estaban involucradas, es decir, que grupo de neuronas se “encendían” al realizar esas acciones durante las copetencias y actividades.
Por otro lado, se invitó al laboratorio a personas con diferente grado de dificultad y discapacidad motriz, a ver películas donde aparecían deportistas y diferentes personas haciendo actividad física, corriendo, saltando; se pudo observar que en el monitoreo de la actividad cerebral de estas personas con discapacidad motriz, se podían identificar en ellos las mismas zonas de neuronas “encendidas”, que las de los deportistas y atletas participantes de la experiencia.
Este hallazgo, me dejó realmente sorprendida y entusiasmada, y la idea me quedó un buen tiempo dando vuelta, ya que este conocimiento nos abría un vasto panorama de investigación en nuevas metodologías de rehabilitación.
Hacía un buen tiempo en mis primeros años como psicóloga clínica, yo había introducido la computadora tanto a la clínica psicológica con niños, como luego a la rehabilitación de pacientes con diversos grados de dificultad desde problemas de aprendizaje, intelectuales y hasta severos cuadros motrices, haciendo seguimiento de los resultados después de un año de tratamiento se observaba no sólo una mejora en rendimientos motrices sino en algunas de las funciones cerebrales superiores y capacidades cognitivas que integran el la inteligencia. Hasta ese momento, , no había a nivel mudial elementos para medir los cambios cuantitativos, y menos los cualittivos del efecto de la tecnología sobre los sujetos, así que tuvimos que construir algunas herramientas para ese fin. Ahi nos encontramos con la investigación y el «Efecto Flynn» y los trabajos del Dr Alan Kaufman , incansable colaborador del Dr. Wechsler (creador del WISC). Al implementar planes y programas de tratamiento y desarrollar herramientas de evaluación y monitoreo, nos sorprendimos al encontrar que después de un año de intervenciones, el CI total de algunos niños había subido algún punto, pero lo más importante era que las gráficas de perfil cognitivo que muestran las diversas habilidades del niño, atención, coordinación viso-motora, razonamiento, entre otras, se habían modificado mostrando mayor rendimiento. En ese momento nos pusimos a perfeccionar la forma de interpretación de los test de inteligencia, dejando de lado el Ci total numerito que solo sirve para «clasificar» y estigmatizar, y nos ocupamos de las capacidades existentes y las potenciales del niño.
Al trabajar con niños del espectro autista, observamos que la computadora y la Wii eran excelentes mediadores y creaban sólidos puentes que favorecían la comunicación y la comprensión de estos niños en diversos códigos que nos abrían mayores posibilidades de encontrar entornos alternativos para conectarnos y trabajar con ellos.
Aquí estaba la expectativa y el gran desafío: el cerebro puede tener grupos de neuronas que virtualmente “hacen algo”, a pesar que el cuerpo nos ponga obstáculos. Más adelante, estudiando la Neuroplasticidad cerebral, los compañeros de neuroimagen y otros neurocientificos nos enseñaron que el cerebro tiene una especie de «augeros negros», circuitos neuronales que parecen «apagados», pero que en algún momento pueden encenderse y comenzar a cumplir alguna función, a esos circuitos yo los llamé hace un tiempo, con todo mi respeto y admiración por este jugador y su persona, «neuronas Messi» , porque todo el que conoce la historia de vida de este jugador, sabe que tras largo esfuerzo y tratamientos pudo construirse en el hombre y brillante jugador de fútbol que es hoy día. Podemos pensar que, con un tratamiento y estimulación adecuada “a la medida de la Persona”, lograremos que desarrolle destrezas, tanto motrices como cognitivas, que perfeccione sus movimientos, que aumente su coordinación, asi como su manejo del espacio; que genere nuevas conexiones neuronales… en definitiva, hacer lo mejor posible para enriquecer su calidad de vida, para que la persona pueda lograr concretar proyectos, anhelos, sueños.
El aumento del uso de determinados dedos de la mano, aumenta su representación cortical.
La corteza cerebral tiene un mapa del cuerpo para cada submodalidad de sensación, y estos “lugares” y cantidad de conexiones de células nerviosas pueden variar su tamaño, se pueden modificar por la experiencia.
Una avance muy importante fue, el uso de la magnetoencefalografia, que permitió elaborar mapas funcionales de la mano en sujetos normales con una precisión de milímetros. Cada persona normal tiene una área de la corteza donde se representa su mano, sus dedos. Se observó que en pacientes que han nacido con un síndrome llamado sindactilia, que consiste en que sus dedos están fusionados, (no son independientes), el tamaño de la representación en la corteza de la mano sindactilica es menor que el de la persona normal y dentro de esa representación no hay una correcta representación de los dedos.
Cuando se realizó una operación de estos pacientes, a modo de separar los dedos de su mano, y posteriormente se los entrenó adecuadamente para adquirir movimientos y coordinación, entre otras habilidades, en semanas apareció en su cerebro una representación individual de cada uno de los dedos.
Se ha descubierto que los estímulos periféricos son capaces de modificar la organización espacial de la corteza, debido a la plasticidad neuronal (3) y la reorganización de la corteza cerebral y sus conexiones, con implicación en la recuperación de funciones tras una lesión cerebral precoz.
Existen experiencias significativas que demuestran que la ejercitación motora puede modificar la organización de los grupos neuronales en el cerebro y favorecer la recuperación funcional.
En la búsqueda constante de ambientes lúdicos que resultaran motivantes para los chicos que requerían reeducacion y rehabilitación motora y cognitiva, implementamos desde hace varios años en nuestro ámbito clínico, el trabajo con programas de realidad virtual. Aquí vemos a un paciente de 9 años, que esta siendo filmando por una web cam que le permite jugar a un juego de romper burbujas utilizando su cuerpo.
Otros juegos, lo introducían en una pista de esquí, donde debía regular muy bien sus movimientos para poder avanzar esquiando ante múltiples obstáculos.
Estos programas nos permiten apuntar a mejorar la precisión de los movimientos, acomodar la equilibración apoyada en la búsqueda de buenas posiciones posturales y depuración de movimientos aislados (brazos, hombro, muñeca, mano, dedos), que pueden reorientarse para el logro de determinados objetivos, (tomar un objeto, señalar hacia una dirección, reconocer lateralidad, etc.).
Con este tipo de actividad, íbamos logrando la internalización del movimiento, trabajando la inhibición muscular necesaria para ajustar las respuestas a los estímulos, y la reeducacion de las funciones cerebrales superiores, como atención, memoria, percepción visual, gnosias, praxias, y lenguaje.
Fue muy notoria la mejora en la autoestima de los chicos, y también en su interacción social.
Estos mundos virtuales que se le presentan permiten que el niño desarrolle el juego simbólico. En el juego simbólico hay una transformación de la realidad; la representación es neta, esta acompañada de objetos que se han hecho símbolos.
La computadora es una máquina que nos permite manipular símbolos, y allí es donde reside su gran capacidad de simulación y de recreación de escenarios que se prestan para ser “vividos” por el niño en un como si.
Otro campo de investigación que incursionamos y que nos parece que puede brindar posibilidades importantes para trabajar con niños con diversas patologías, es la robótica educativa y las aplicaciones de IA y sistemas expertos. utilizando una interface, y el querido lenguaje de programación LOGO, y los famosos LEGO, creábamos con los chicos sistemas robotizados, entornos muy sencillos de acuerdo a las posibilidades que había en esa época, donde acceder a estos materiales representaba un costo importante. Fue muy interesante observar la interacción del niño con su producto final, una creación propia, que tenia movimiento, que podía «manejar» a través de la programación en la computadora , como el chico desarrolla estrategias para mejorar la performance del «robot» en secuencias de aprendizaje por ensayo y error, en fin fue una experiencia muy hermosa que me gustaría volver a reproducir con las posibilidades actuales y acceso que nos da la tecnología y los nuevos lenguajes «mas amigables » de programación de sistemas roboticos y expertos, para aplicarlos en los tratamientos, en el desarrollo de salas multisensoriales «inteligentes»….
Lo último….. la Consola Nintendo Wii.
“A diferencia de otros video-juegos, que solo requieren el uso de los dedos de la mano, la consola Wii exige el empleo de todo el cuerpo, equilibrio y coordinación de movimientos” (4)
En algunos hospitales de Estados Unidos y gran Bretaña, están usando la consola Wii para la rehabilitación de pacientes que tienen algún tipo de lesión cerebral provocada por accidentes o por infartos cerebrales.
Esta consola, que en realidad es como la CPU de una computadora, pero que trabaja con un software que tiene una interfase virtual, donde el niño, el adolescente, el adulto, mediante uno o dos tipos de controles remotos, realiza movimientos con partes de su cuerpo, en especial, manos, brazos, piernas y de ese modo, salta, corre, toca música, de acuerdo a lo que el programa que ha cargado requiere. Por ejemplo, se pueden cargar juegos de deportes populares, como el tenis, golf, boxeo, fútbol, entre otros, asi como juegos donde el niño tiene que desarrollar determinadas estrategias para poder avanzar y llegar a determinados objetivos y todo esto moviendo su cuerpo, adoptando determinadas posiciones, extendiendo sus brazos, de acuerdo a como lo requiera la actividad, tal cual como lo haría en el mundo “real”.
Esta forma de trabajo, ya que apela a la motivación del niño, disminuye notablemente el ausentismo a las sesiones como hemos podido comprobar en el ámbito clínico.
“El juego crea una zona de desarrollo próximo en el niño. Durante el mismo, el niño esta siempre por encima de su edad promedio, por encima de su conducta diaria; en le juego es como si fuera una cabeza más alto de lo que en realidad es”.
“A medida que el juego va desarrollándose vemos un avance hacia la realización conciente de un propósito. Es erróneo pensar que el juego constituye una actividad sin objetivos, el propósito decide el juego y justifica la actividad”.
Vigotsky “El papel del juego en el desarrollo del niño»
Prof. Silvia Pérez Fonticiella.
Consultora en Neurociencias.
IINNUAR
Unidad de Neurocirugía de Epilepsia Sanatorio Allende.
CORDOBA
(1) Raúl Ruggia Jefe de Servicio de Neuropediatria Hosp. De Clinicas Montevideo Uruguay
Dra. Rosario Bonaglia. Neuropediatra Banco de Previsión Social.
Soc Uruguaya de Neuropediatria. Sociedad Argentina de Neurología Infantil.
(2) James Schwartz, MD, PhD Profesor Center of Neurobiology and Behavior Columbia Univ.
(3) Silvia Pérez Fonticiella Consultora en Neurociencias.
Reeducacion y Rehabilitación Cognitiva en entornos informatizados.IINNUAR
El «efecto CEIS»
(4) Ben Rucks Director Serv Rehabilit. Hospital Riley USA.